La promoción de la actividad física y otros apoyos conductuales pueden ayudar a dejar de fumar a corto plazo a las personas que desean reducir su consumo de tabaco. Sin embargo, al cabo de nueve meses, la actividad física no aporta beneficios apreciables, en comparación con la ausencia de apoyo adicional, en las tasas de personas que dejan de fumar, según las conclusiones de un importante estudio nacional. Estudio publicado en la revista 'Addiction'.
La mortalidad en varones ha descendido en las dos últimas décadas un 29 %, pero la de las mujeres se ha duplicado en este mismo tiempo. La causa es la misma: el tabaco.
La Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso de los Diputados ha rechazado este martes (por el día 14), con 16 votos a favor, 19 en contra y 2 abstenciones, una Proposición No de Ley (PNL) del PP que reclamaba al Gobierno que pusiera en marcha una investigación sobre la posibilidad de utilizar productos de tabaco, como los cigarrillos electrónicos, para ayudar a dejar de fumar.
También hay actos reflejos psicológicos, como la cantidad de veces que se hace el acto de llevar el cigarro a la boca, y una influencia social que asocia el tabaco con el placer
Desde los años noventa, la mortalidad atribuida al consumo de tabaco en mujeres está aumentando, sobre todo por cáncer de pulmón y enfermedades cardiovasculares.
Bodegas Ramón Bilbao sella un acuerdo con la Federación para convertirse en el vino oficial del equipo, en un nuevo ejemplo de promoción de bebidas alcohólicas en el ámbito deportivo