Naipes, dados, ruleta, loterías. Pueden atrapar a una persona y no volverla a soltar. La aprisionan tanto como lo hace el mismo cigarrillo o el alcohol. Y así, esta persona se convierte en un dicto más. Adicto al juego o ludópata.
Alertan de una «bolsa oculta» de mujeres ludópatas, y entre los trastornos alimenticios, revelan que entre el tres y el cinco por ciento de la población femenina padece bulimia.
Los resultados del gabinete de drogodependencias relativos al año 2002 constatan la aparición de ludopatías que representan un 5,64% de los 638 casos tratados por los técnicos, cuando el año anterior no se había registrado ninguna situación de estas características.
El último informe de la Asociación Alicantina de Afectados por la Ludopatía (AAAL) califica internet y los vídeojuegos como nuevas adicciones, propias de esta nueva era de la comunicación.