Un estudio en que se empleó el test de la señal de detención muestra que las conexiones son diferentes en un caso y en otro, lo que sugiere que el origen neuronal de estas conductas sería distinto.
Los resultados son esperanzadores y confirman que uno, cinco y diez años después de su salida de comunidad terapéutica, los drogodependientes muestran altas tasas de abstinencia y mejoría notables en aspectos tales como la salud, la vida laboral y las relaciones familiares. También disminuyen notablemente el comportamiento agresivo y las transgresiones de la ley derivadas del consumo de drogas.
El consumo de varias dosis de "éxtasis" durante una única noche es suficiente para que el cerebro sufra una lesión que, al cabo de los años, provoque algún trastorno neurológico grave.