Diversos científicos han medido el catastrófico daño genético causado por el tabaquismo en diferentes órganos del cuerpo e identificado varios mecanismos distintos por los cuales el tabaco causa mutaciones en el ADN.
Investigadores de la Universidad de Edimburgo (Escocia) han encontrado que el consumo regular de cannabis puede asociarse a una menor densidad ósea que podría favorecer un mayor riesgo de fracturas de huesos, según publica la revista 'American Journal of Medicine'.
En este artículo publicado en Infocop, se presentan los principales resultados de una investigación sobre conducción y uso de drogas con una muestra representativa de jóvenes españoles. Respecto los datos examinados, la conclusión más importante sería que el exceso de confianza al volante podría dar lugar a las conductas imprudentes que provocan a su vez los accidentes.
El aumento del consumo de cannabis es uno de los factores que ha contribuido a que en los últimos años se estén detectando más casos de trastorno bipolar en España, ya que el riesgo de que se desarrolle aumenta ya desde la primera exposición a esta sustancia y es mayor entre la población más joven.
El consumo de alcohol y tabaco por parte de los jóvenes de 15 y 16 años sigue disminuyendo en Europa pero los expertos alertan de la aparición de nuevas drogas y de otros comportamientos adictivos, como el relativo al uso incontrolado de internet.
Según revela una nueva investigación publicada en 'Circulation: Cardiovascular Genetics', fumar deja su "huella" en el genoma humano en la forma de la metilación del ADN, un proceso por el cual las células controlan la actividad de los genes.
Iniciarse en el consumo de alcohol entre los once y los trece años se relaciona con un mayor riesgo de sufrir alteraciones psicológicas en el futuro, según revela un estudio en el que participa la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Santiago de Compostela.
La orden de EEUU de bloquear todos los petroleros venezolanos sancionados, ha elevado la tensión en la zona, poniendo en peligro la estabilidad regional y los intereses españoles.
Varios países de la Unión Europea han implementado programas de naloxona como parte de estrategias de reducción de daños para prevenir muertes por sobredosis.