Los mayores de 65 años presentan más síntomas de fragilidad cuando son fumadores, hasta un 60 por ciento más en comparación con quienes ya han dejado de fumar o no lo han hecho nunca, según datos de un estudio del University College de Londres (Reino Unido) que publica la revista 'Age and Ageing'.
Un estudio realizado por la Universidad de Drexel (EEUU) ha demostrado que incrementar tan solo 1 dólar (alrededor de 0,85 euros) el precio del tabaco hace que los fumadores "más veteranos" tengan un 20 por ciento más de probabilidades de dejarlo, un efecto que creen similar o "más fuerte" entre la población más joven, según la revista 'Epidemiology'.
Los juegos activos problemáticos más frecuentes son las máquinas recreativas con premio --comúnmente llamadas tragaperras--, seguidas de las salas recreativas y los bingos, según concluye el Estudio y análisis de los factores de riesgo del trastorno de juego en población clínica española 2017, coordinado por la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ).
Un estudio de la Universidad de Pittsburgh (EEUU) ha evidenciado que el consumo de opiáceos no disminuye una vez se ha superado una sobredosis, dado que los investigadores "apenas" han observado ligeros aumentos en el uso de tratamiento asistido por medicamentos para frenar la adicción.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Michigan (EEUU) ha evidenciado que fumar aumenta un 26,3 por ciento las probabilidades de recurrencia de un aneurisma erebral en aquellos pacientes que siguen un tratamiento endovascular. Estudio, publicado en la revista 'Journal of Neurosurgery'.
Una investigación publicada en la revista 'Tobacco Control' plantea preguntas sobre el papel que los cigarrillos electrónicos pueden desempeñar en la progresión que los adolescentes hacen hasta fumar su primer cigarrillo e identificó una "fuerte asociación" entre el uso de cigarrillos electrónicos y la mayor probabilidad de fumar un cigarrillo en el año.
Así lo pone de manifiesto un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Estatal de Georgia, en Estados Unidos, y que ha sido publicado en European Journal of Preventive Cardiology.
Los fumadores que usan cigarrillos electrónicos tienen más probabilidad de dejar de fumar que aquellos que no los utilizan, de acuerdo con un nuevo estudio. Los parches de nicotina, las gomas de mascar y medicamentos son ya reconocidos por ayudar a dejar de fumar, pero no existe consenso sobre los vaporizadores.