Artículo de análisis de los primeros pasos del nuevo gobierno peruano y de los condicionantes políticos y sociales que, junto a la evolución del narcotráfico, pueden incidir en la prevista nueva Estrategia Nacional de Control de Drogas 2017/2021.
Investigadores de la Universidad de Cardiff (Reino Unido) investigan un nuevo tratamiento farmacológico para tratar la adicción a la cocaína, según un estudio publicado en la revista 'eLife'.
Las personas que son adictas a la cocaína son particularmente propensas a desarrollar hábitos que hacen que su comportamiento sea resistente al cambio, sin importar las consecuencias potencialmente devastadoras, según sugiere una nueva investigación de la Universidad de Cambridge, en Reino Unido.
El rigor profesional, la presión del entorno, la paranoia por la perfección, la inadmisión de errores, el temor al fracaso, la ambición por ser el mejor, por ganar dinero y por superar cada día los estándares de vida son, entre otras cosas, algunas de las muchas obsesiones que llevan a un profesional adentrarse en el mundo de las drogas.
Tras la tragedia de Costa Salguero. Son datos de la Unidad Fiscal Especializada en Ciber-delincuencia. Y expertos en adicciones lo confirman en sus consultorios. Afirman que el anonimato virtual beneficia a los dealers y que eso dificulta detenerlos.
Europol y el Observatorio Europeo de la Droga y Toxicomanías (OEDT) han presentado en Bruselas su informe sobre el mercado de las drogas ilegales en Europa.
El pasado 11 de febrero de 2016 se publicaron los resultados de la Encuesta sobre Uso de Drogas en Estudiantes de Enseñanzas Secundarias (ESTUDES) 2014/2015, donde se revelan las tendencias del consumo de alcohol y otras drogas entre los escolares españoles. A continuación se presentan los datos más significativos en relación a la cocaína.
"Podría ser una vía para personas que no quieran fumar o inyectar y prefieran optar por una vía alternativa, pero para aquellas personas que ya consumen es una vía de administración que no tiene mucho sentido"
Una bebida energética “promedio” contiene en torno a 80 mg de cafeína por porción de 250 ml, frente a los aproximadamente 30 mg de una taza de té o los 90 mg de un café.