Un análisis de 500 muestras a cargo de Energy Control revela que sólo el 5% eran puras, y el resto contenían adulterantes (41%), adulterantes con diluyentes (37%) o cafeína (16%).
El reciente hallazgo, publicado en la revista Science of The Total Environment, se enmarca en un estudio a escala mundial sobre “drogas de abuso en acuíferos urbanos”.
En este trabajo se analiza cómo el aumento de los impuestos afecta a la demanda de productos derivados del tabaco, en especial a la demanda de cigarrillos.