Un estudio en ratones sugiere que la cocaína puede disparar el ritmo de replicación celular del VIH hasta el punto de convertirlo en 200 veces más rápido.
La capacidad de infección de VIH in vitro se ve aumentada ante la presencia de metadona, lo que hace plantear la idoneidad del uso de ésta para el tratamiento de la dependencia a opiáceos.
Las personas jóvenes que han crecido en contextos de desventaja estructural suelen encontrarse inmersas en circuitos institucionales marcados por vacíos asistenciales y carencia en el acompañamiento