Desde hace décadas la comunidad científica es consciente de que el déficit de atención e hiperactividad (TDAH) predispone el desarrollo de un trastorno adictivo, y, a su vez, "la adicción influye de manera muy negativa en el curso del TDAH", explica el doctor Martínez-Raga, del Hospital Universitario Dr. Peset de Valencia, quien afirma que hasta el 23 por ciento de las personas adictas sufren este trastorno.
Una campaña organizada por la fundación Patología Dual señala que uno de los principales mitos que existen sobre drogas es que las personas que se vuelven adictas no lo hacen porque quieran sino porque tienen una mayor vulnerabilidad genética.
Un estudio en que se empleó el test de la señal de detención muestra que las conexiones son diferentes en un caso y en otro, lo que sugiere que el origen neuronal de estas conductas sería distinto.