Hace un tiempo surgió la hipótesis de que el mayor uso de los móviles entre los adolescentes británicos había propiciado una reducción del consumo de tabaco en este grupo de edad.
Las encuestas realizadas revelan que el 65 por ciento de los fumadores intentaría dejar el tabaco si la Seguridad Social financiara los tratamientos farmacológicos.
La evolución de la prevalencia del consumo diario de cigarrillos siguió en el último cuarto del pasado siglo tendencias dispares en España en función del sexo.
El número de fumadores diarios en la Comunidad Valenciana descendió seis puntos, mientras que en España creció 2,5 puntos entre 1999 y 2001. Rafael Blasco afirmó que esta situación se debe a "las avanzadas políticas preventivas del Gobierno valenciano son el modelo secundado por el Plan Nacional para la Prevención y el Control de Tabaquismo 2003-2007".
En Nueva Hampshire el número de fumadores entre los escolares y estudiantes se redujo casi a la mitad después de una importante subida del paquete de cigarrillos.
Contará con un presupuesto de 13,6 millones de euros para este año y Sanidad evaluará las alternativas terapéuticas contra el tabaco de cara de cara a su posible financiación.