El secretario general de la Organización de los Estados Americanos, José Miguel Insulza, destacó que los países miembro de la OEA ya cuentan con dos logros importantes: reconocer que la lucha contra el problema mundial de las drogas en las Américas no puede ser tratado desde la represión, así como la necesidad que existe de ampliar su combate hacia un enfoque de salud de los dependientes.
Los países americanos se comprometen a aportar políticas complementarias a la represión antes de 2014. EE UU acepta un cambio en la lucha contra los estupefacientes. Ministro de Exteriores de Guatemala: "Ya podemos hablar de la política de drogas”.