Corea del Sur es uno de los países más conectados del mundo. Casi todos tienen un teléfono inteligente y acceso a internet. Y, sin embargo, esas ventajas tienen un lado oculto.
Una encuesta, realizada a más de 3.400 estudiantes de EEUU y publicada en el 'Journal of Behavioral Addictions', ha encontrado que el uso excesivo del teléfono móvil se asocia a calificaciones más bajas, abuso de alcohol, problemas de salud mental y un mayor número de parejas sexuales.
"Un 75% de la población mundial afirma tener dependencia al móvil. España es el país europeo con más adicción adolescente a la Red, el 21,3% de los adolescentes la padecen, mientras que la media europea se sitúa en un 12,7%", alerta a Infosalus Marc Masip, psicólogo y experto en adicciones a las nuevas tecnologías con motivo de la publicación de 'Desconecta' (Libros Cúpula), un manual para ponernos a prueba y ayudarnos a descubrir cuán dependientes somos de nuestro teléfono móvil.
La ansiedad, la impulsividad y el consumo de alcohol, predictores de la dependencia al dispositivo, al que son adictos el 5% de los españoles, según un estudio en el que participa la Universidad Complutense.
Preparada como un material educativo destinado a ofrecer formación para jóvenes, progenitores, profesorado, etc. Información sobre sustancias, ludopatía, internet y redes sociales, televisión y videojuegos.
El uso desmedido del aparato les ha creado dependencia en tan sólo un año. Los menores padecían un trastorno de conducta que degeneró en fracaso escolar.