Junto con el debate que se instaló en Uruguay en torno a la idea de que el Estado se ocupara de la producción y comercialización de marihuana, algunos empresarios se animaron a ocupar el nicho que genera el “bajón”.
Las leyes federales prohíben la distribución y posesión de esta sustancia. El Departamento de Justicia niega también la legalidad del cannabis medicinal.
El uso de la marihuana para uso terapéutico ya es una realidad en varios estados de Estados Unidos y es cuestión de tiempo que su legalización se amplíe a lo largo y ancho del globo.