En las ciudades el juego patológico y las apuestas suponen un problema creciente, y afectan sobre todo a colectivos vulnerables. Con el fin de poner freno a este aumento, la Comisión de Gobierno del Ajuntament ha aprobado inicialmente el plan de usos que debe regular la presencia de locales de juegos de azar en la ciudad
"la precariedad laboral, el estigma asociado a la adicción o la falta de acceso estable a la atención médica" son factores "negativos" para esta población.
Muchos de los videojuegos más populares cuentan con cajas de recompensa para incentivar a invertir dinero a cambio de recibir una selección aleatoria de artículos del juego.