El consumo habitual de cannabis estimula la funcionalidad de los receptores alucinógenos del cerebro, según un estudio llevado a cabo por la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y el CIBER de Salud Mental (CIBERSAM), publicado en la revista 'Neuropsychopharmacology' y presentada en una jornada celebrada con motivo de la Semana de Humanidades de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao.
Un 24 % de la base genética que predispone a consumir cannabis es común a la de la esquizofrenia, por lo que las personas que sufren esquizofrenia presentan un mayor riesgo de consumir cannabis, según un estudio internacional que ha analizado muestras de más de 184.000 pacientes.
La investigación abre vías para generar estrategias de prevención, así como diseñar fármacos y terapias que mejoren la vida de las personas con esta enfermedad. El objetivo final es identificar la la existencia de cambios moleculares similares en personas que consumen cannabis para poder relacionarlos con el riesgo de desarrollo de psicosis o esquizofrenia y, por otro, generar nuevos fármacos que mejoren la sintomatología de los pacientes con esquizofrenia.
Un trabajo de la Universidad de York (Reino Unido) ha determinado que el riesgo de psicosis que se le ha atribuido al consumo de cannabis es en realidad más bajo de lo que se pensaba hasta ahora, según un estudio publicado en la revista 'Addiction', que también ha demostrado que la droga empeora los síntomas de pacientes con esquizofrenia.
Científicos del Instituto Pasteur y otros centros de investigación franceses han descubierto cómo la nicotina tiene un impacto directo en la restauración de la actividad neuronal implicada en trastornos psiquiátricos como la esquizofrenia, lo que explicaría por qué los afectados por este trastorno tienen un mayor nivel de dependencia al tabaco.
Investigadores ingleses han realizado un estudio que evidencia una asociación entre el consumo de cannabis y el riesgo a desarrollar esquizofrenia, no obstante han advertido de que es necesaria una mayor investigación sobre los vínculos entre la salud mental y las drogas ilícitas.