A medida que aumenta el uso del cannabidiol (CBD), se necesitan ensayos clínicos aleatorios de alta calidad para determinar si sus beneficios antiinflamatorios para las enfermedades cardíacas observados en los datos preclínicos funcionarán en el mundo real, según una investigación presentada en el ACC Latinoamérica 2022 junto con CardioAcademic.
La bebida recreativa, el tabaquismo y el consumo de drogas están relacionados con enfermedades cardíacas prematuras en los jóvenes, en particular en las mujeres más jóvenes, según una investigación publicada en línea en la revista 'Heart', que revela que quienes consumen 4 o más sustancias con regularidad tienen 9 veces más probabilidades de verse afectados.
Si bien existe alguna evidencia de que beber con moderación podría prevenir ataques cardíacos, un estudio clínico aleatorizado y doble ciego sobre 100 pacientes cardíacos añade sombras de duda en el debate sobre el alcohol y las enfermedades cardíacas, según publican sus autores en el 'Journal of the American College of Cardiology: Clinical Electrophysiology'.
Investigadores del New Brunswick Heart Centre (Canadá) han advertido de que, en un contexto de legalización del cannabis para uso médico, "no existe suficiente evidencia científica" acerca de los riesgos y beneficios de la marihuana, especialmente en pacientes con enfermedades cardiacas.