El consumo de alcohol en personas con VIH se asocia con niveles más bajos de una proteína involucrada en la formación del hueso y el aumento del riesgo de osteoporosis, según han demostrado investigadores de la Escuela de Salud Pública (BUSPH) y la Escuela de Medicina (BUSM) de la Universidad de Boston (Estados Unidos), en un estudio publicado en la revista 'Alcoholism: Clinical and Experimental Research'.
Investigadores de la Universidad de Charité, en Berlín (Alemania), ha dado un paso importante hacia el desarrollo de analgésicos de nueva generación que no causan adicción y que trabajarán directamente sobre el tejido lesionado.
Las concentraciones de nicotina y compuestos orgánicos volátiles relacionados con el tabaquismo se disparan cuando los espectadores entran en una sala de cine bien ventilada para no fumadores, exponiéndolos al equivalente al humo de segunda mano de entre uno y diez cigarrillos, según publican los investigadores en la revista 'Science Advances'.
Se ha descubierto que un compuesto a base de cannabis elimina las bacterias resistentes a los medicamentos, lo que aumenta la esperanza de una nueva arma en la lucha contra las superbacterias.
Solo un 15% de las personas en tratamiento en Proyecto Hombre son mujeres, una cifra que demuestra la invisibilización de este fenómeno. “Es necesaria más prevención y una mayor implicación de la sociedad”, señala Elena Presencio, directora general de la Asociación Proyecto Hombre.
Investigadores del Instituto Hubrecht (KNAW) de Utrecht (Países Bajos) y el MRC Laboratorio de Biología Molecular de Cambridge (Reino Unido) han descubierto una nueva forma en la que el cuerpo humano repara los daños del ADN causados por un producto de degradación del alcohol.
Según datos proporcionados por el Ejecutivo al diputado de EH Bildu Jon Iñarritu, en 2019 hubo 4.806 casos de presos con esa enfermedad. Entre 2015 y 2018 se registraron 20 muertes por esta enfermedad en las cárceles. Instituciones Penitenciarias reivindica que el 98% consigue curarse.
El informe ha identificado 35 países con pena de muerte para los delitos de drogas, aunque solo un pequeño número de estos lleva a cabo ejecuciones de forma regular.