El consumo de narcóticos, tranquilizantes, sedantes o somníferos se ha incrementado entre la población asalariada desde la declaración del estado de alarma. Más de un tercio de los trabajadores perciben que su estado de salud ha empeorado desde el inicio de la pandemia. En determinados colectivos profesionales, muchos de ellos altamente feminizados, los efectos de la crisis del coronavirus en la salud laboral podría ser aún más graves.
¿Qué ha cambiado en el mundo de las drogas durante los dos meses de confinamiento? Javier Sánchez Arroyo, coordinador de Consumo ConCiencia, responde a las dudas sobre el uso y posible abuso de sustancias en este tiempo.
Un lucrativo negocio al que las autoridades asestaron recientemente un llamativo golpe al firmar una de las operaciones antinarcóticos más grandes de la historia en el sudeste asiático
Hasta un 40 por ciento de los fumadores asegura haber fumado más desde que empezó la crisis del COVID-19, según una encuesta 'on line' realizada por Top Doctors publicada con motivo del Día Mundial del Tabaco, que se celebra el próximo 31 de mayo.
Buscar sensaciones fuertes es algo inherente a la propia naturaleza, sobre todo en algunas etapas de nuestra vida. Los adolescentes, por ejemplo, se embarcan en muchas aventuras de alto riesgo que aceleran su motivación de una manera explosiva e incendiaria.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que los fumadores corren mayor riesgo de sufrir síntomas graves y de morir por Covid-19, desmintiendo de esta forma algunos pequeños estudios que apuntaban que la nicotina podría ser un factor protector contra el nuevo coronavirus.
Nofumadores.org, de la mano de la iniciativa ciudadana XQNS para el avance de la Ley de Tabaco, junto a la Federación de las Asociaciones de Enfermería Comunitaria y Atención Primaria (FAECAP), la Red Europea de Prevención del Tabaquismo (ENSP) y Lovexair, han pedido al Gobierno establecer una distancia social de 10 metros para fumar o vapear.