Esta patología no provoca síntomas hasta que está muy avanzada y puede llegar a ser irreversible. Puede presentarse como esteatosis hepática alcohólica, hepatitis alcohólica y cirrosis etílica.
El 30 por ciento de los pacientes con hígado graso no alcohólico tiene daño hepático relacionado con el alcohol, según un estudio llevado a cabo por investigadores del Hospital Universitario de Viena y que ha sido publicado en el 'Journal of Hepatology'.
La presión por lograr un cuerpo que encaje en los cánones de belleza actuales combinada con la necesidad de tenerlo lo antes posible y con un esfuerzo mínimo empuja a muchas personas, varones en su gran mayoría, a consumir esteroides, una sustancia puede llevar aparejados problemas físicos, como daño hepático, y riesgo de adicción.