La ingesta de una dosis de cocaína genera cambios en varias zonas cerebrales. Las áreas alteradas se vinculan con la toma de decisiones y el aprendizaje.
Un equipo de investigadores de la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore, Maryland (Estados Unidos), informa del hallazgo de una proteína clave relacionada con el "aprendizaje" para convertirse en adicto a la cocaína.
Según un informe de la ONU la edad de inicio de consumo es de 13 años. Es muy barata, fácil de conseguir y crea una gran dependencia. Al fumarla da euforia, pero luego provoca ansiedad e insomnio.
Un estudio llevado a cabo por el Hospital del Mar sobre el uso de ambas sustancias en los últimos 38 años revela que las primeras experiencias, tanto en cannabis como en cocaína, suelen darse en jóvenes entre 15 y 19 años.
El trabajo, que se ha publicado en la revista Nature, ha estado encabezado por científicos de los Institutos Nacionales de Salud de EEUU (NIH) y del Centro de Investigación Ernest Gallo en la Universidad de California en San Francisco (UCSF).
Una bebida energética “promedio” contiene en torno a 80 mg de cafeína por porción de 250 ml, frente a los aproximadamente 30 mg de una taza de té o los 90 mg de un café.
La orden de EEUU de bloquear todos los petroleros venezolanos sancionados, ha elevado la tensión en la zona, poniendo en peligro la estabilidad regional y los intereses españoles.