Así lo asegura un estudio del Grupo de Investigación en Neurobiología del Comportamiento de la Pompeu Fabra (UPF). Una sustancia derivada del cannabis atenúa el efecto adictivo de la cocaína.
El 48,4% de los estudiantes de 14 a 18 años ha probado cigarrillos electrónicos, frente al 20,1% de 2016. Desde 2010, la percepción de riesgo del cannabis es menor que la del tabaco. El consumo de alcohol reciente desciende (del 67% al 58,5%), pero aumentan las borracheras en el último mes (el 24,3% frente al 21,8%). Por primera vez, la encuesta recoge el consumo de videojuegos: el 82,2% dice haber jugado a videojuegos en el último año. El uso compulsivo de internet se ha estabilizado en un 20%. El consumo de cocaína alcanza mínimos históricos: menos del 1% de los jóvenes reconoce haberla consumido en el último mes.
Según un macroestudio internacional que ha monitorizado el consumo de drogas (anfetamina,metanfetamina, éxtasis y cocaína), en 37 países a través del análisis de las aguas residuales generadas por 60 millones de personas de 120 ciudades, entre 2011 y 2017.
Los usuarios de drogas alcanzan su mayor nivel histórico de consumo mientras los traficantes hunden los precios de sustancias psicoactivas como la cocaína y los derivados de la anfetamina ante la superproducción en Latinoamérica y Europa.
En la actualidad, el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) identifica los trastornos por uso de sustancias (TUS) como trastornos primarios...
Proyecto Hombre Cantabria atendió el año pasado a cerca de 2.150 personas por distintas causas y adiciones, entre las que destaca el alcoholismo en general, que acapara la mayor demanda de tratamientos (el 28% del total), y entre las mujeres en particular, dado el "notable" incremento experimentado en este colectivo, de un 15%
En el libro “Écrits stupéfiants” (escritos estupefacientes), la francesa Cécile Guilbert investiga sobre la relación entre literatura y drogas. La ensayista pasó años estudiando los textos literarios en búsqueda de información sobre los productos consumidos por sus autores.
El aumento de los síntomas depresivos sería proporcional a la frecuencia de uso de metanfetamina. Según estos hallazgos, los investigadores sugieren que reducir el uso de sustancias y, en especial de metanfetamina, puede reducir los síntomas depresivos y otros problemas concomitantes como conductas sexuales de riesgo.