El uso de cigarrillos electrónicos, cachimbas, cigarrillos de tabaco no combustible o tabaco sin humo por parte de los adolescentes se asocia con el hecho de comenzar a fumar cigarrillos convencionales en un año, según concluye una investigación cuyos resultados se publican en 'JAMA Pediatrics'.
Los cigarrillos electrónicos son utilizados con mayor frecuencia por personas que recientemente dejaron de fumar y bebedores de alcohol, según una investigación preliminar presentada en las Sesiones Científicas 2017 de la Asociación Americana del Corazón, que se celebran en Anaheim, California, Estados Unidos.
Los sistemas electrónicos de administración de nicotina (ENDS, por sus siglas en inglés) como los cigarrillos electrónicos afectan el ritmo cardiaco y la función cardiovascular en ratones, según una investigación preliminar presentada en las Sesiones Científicas de 2017 de la Asociación Americana del Corazón, que se celebran en Anaheim, California, Estados Unidos.
El consumo de cigarrillos electrónicos por parte de estudiantes de secundaria está asociado con el posterior consumo de cigarrillos, según un amplio estudio realizado en dos provincias canadienses y publicado en 'Canadian Medical Association Journal'.
Incluso aunque sepa a ositos de gominolas y se inhale como un aerosol libre de humo, los cigarrillos electrónicos (e-cigarrillos) con mayores concentraciones de nicotina pueden aumentar la frecuencia con la que los adolescentes consumen estos productos o fuman cigarros tradicionales, según un estudio de la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California (USC, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos.
Los cigarrillos electrónicos parecen desencadenar respuestas inmunes únicas, así como las mismas que provocan los cigarrillos que pueden llevar a desarrollar enfermedades pulmonares, según revela una nueva investigación publicada en la edición digital de 'American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine', de la Asociación Torácica Americana.
Un nuevo estudio de la Universidad de California Los Ángeles (UCLA), en Estados Unidos, encontró que los no fumadores sanos experimentaron mayores niveles de adrenalina en su corazón después de un cigarrillo electrónico (e-cigarrillo) con nicotina, pero no hubo mayores niveles de adrenalina cuando los sujetos del estudio usaron un e-cigarrillo libre de nicotina o vacío. A diferencia de los cigarrillos, los e-cigarrillos no tienen combustión o tabaco, sino que estos dispositivos portátiles electrónicos suministran nicotina con aromatizantes y otros productos químicos en un vapor en lugar de humo.
Científicos de centros españoles muestran que el cigarrillo electrónico es percibido como menos peligroso por los adolescentes y alertan de que podría convertirse en una vía adicional de iniciación al tabaco.