“Estos desarrollos pueden señalar el primer cambio importante en el mercado de los reemplazos 'legales' del cannabis desde que surgieron en Europa productos tipo Spice"
Este jueves día 7 de Junio se ha publicado en Bruselas el Informe Europeo sobre Drogas 2018: Tendencias y novedades, por parte del Observatorio Europeo de Drogas y Toxicomanías (EMCDDA). En esta edición se apuntan pruebas del aumento de la disponibilidad de cocaína en la última década, evolución que se da porque el mercado de drogas es dinámico y se adapta rápidamente en respuesta a las medidas de control de las drogas. Además, se exploran otros grandes retos como los asociados a las nuevas sustancias psicoactivas (NPS), entre los cuales se encuentra la disponibilidad de nuevos opioides sintéticos y los problemas asociados con el uso de cannabinoides sintéticos. Os dejamos la nota de prensa íntegra para que las lectoras y los lectores puedan acceder a un completo resumen de dicho informe.
La Comisión Europea ha propuesto este lunes prohibir siete nuevas sustancias psicoactivas adicionales en la Unión Europea -cuatro cannabinoides sintéticos que imitan los efectos de la marihuana pero son mucho más nocivos, entre ellas la 'Spice', la 'Hierba legal' y el 'incienso de hierbas', y tres opioides sintéticos relacionados con el fentanilo, que es 50 veces más potente que la heroína-, que han provocado la muerte de más de 170 personas en la UE.
La mayor encuesta mundial de drogas publica el 'ranking' de sustancias recreativas con más emergencias médicas. Metanfetamina, canabinoides sintéticos y alcohol son las que más llevan a urgencias. Las setas alucinógenas requieren cinco veces menos asistencias que la cocaína.
Una nueva investigación que examinó cómo el cuerpo procesa estas drogas hechas por el hombre y el papel que la genética podría jugar en su metabolismo podría revelar factores genéticos que elevan el riesgo de una persona de experimentar los efectos más peligrosos de estos fármacos y llevar a nuevos tratamientos para contrarrestar esos efectos.
Se está detectando un aumento de la presencia de compuestos sintéticos (NPS) de consecuencias desconocidas. Son sustancias más potentes que las drogas clásicas y con efectos muy poco conocidos o desconocidos. En este artículo, Nuria Calzada y Joan Colom ayudan a esclarecer las claves del asunto.