La DYA asegura que ha lanzado la campaña con el objetivo de reducir las víctimas de los accidentes de tráfico ya que por ejemplo en 2015, el 43,10% de los conductores fallecidos dieron positivo en alcohol, drogas y/o psicofármacos.
51 personas ha usado en una semana las dependencias de Bilbao. El perfil corresponde a un varón "sin techo" de 35 años que se administra la droga por vía intravenosa, y con varios fracasos en tratamientos de desintoxicación.
La primera sala «de consumo higiénico» de drogas ilegales o «narcosala», según su denominación popular, de Euskal Herria abrirá sus puertas el próximo verano en el centro de Bilbo, según las previsiones de los responsables de la iniciativa, Lakua y la ONG Médicos del Mundo.