Los cigarrillos electrónicos son utilizados con mayor frecuencia por personas que recientemente dejaron de fumar y bebedores de alcohol, según una investigación preliminar presentada en las Sesiones Científicas 2017 de la Asociación Americana del Corazón, que se celebran en Anaheim, California, Estados Unidos.
El vapor del cigarrillo electrónico (e-cigarrillo) puede plantear un riesgo igual o incluso mayor que fumar tabaco para empeorar un accidente cerebrovascular, según concluye un estudio preliminar realizado en ratones y cuyas conclusiones se presentan en la Conferencia Internacional de Ictus 2017, organizada por la Asociación Americana del Corazón.
El sangrado en el interior del revestimiento del cerebro (hemorragia subaracnoidea) es significativamente más frecuente entre los fumadores, especialmente en las mujeres fumadoras, que en las personas que no consumen tabaco, según revela una nueva investigación que se publica en la revista 'Stroke' de la Asociación Americana del Corazón.