El consumo de estos fármacos ha aumentado un 79% en siete años. El Gobierno de España y las comunidades autónomas crean un grupo de trabajo para evaluar su prescripción.
El analgésico, descubierto por un grupo de investigadores en EEUU, podría allanar el camino para tratamientos del dolor intenso que no acarreen los graves efectos secundarios asociados a la morfina y a los opiáceos sintéticos.
Los condados donde los médicos obtuvieron más comidas, viajes y honorarios de consultoría de los fabricantes de opioides tuvieron mayores muertes por sobredosis que involucran los opioides recetados.
La Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (UNODC) publicó su informe anual en el que se destacan 3 tendencias: crisis de opioides, abuso de medicamentos y niveles récords de opiáceos y cocaína a nivel mundial.
Las sobredosis de opiáceos mataron en 2016 a 115 personas al día, unas 80 de ellas causadas directamente por medicamentos legales para aliviar el dolor. El Congreso ataca a la DEA por no hacer nada cuando sabía que se estaba haciendo un uso fraudulento de los fármacos responsables de la epidemia. Los congresistas se preguntan por qué el número de opiáceos vendidos a farmacias, clínicas y hospitales se multiplicó por cuatro entre 1999 y 2010.
El congreso de las farmacias de asistencia primaria se centra en el uso de medicamentos que crean adicción. Piden la creación de unidades multidisciplinares que controlen el consumo de estas sustancias.
La deshabituación de quien sufre adicción a estos fármacos incluye psicoterapia e introspección meditativa. "La principal dependencia de estos medicamentos no la crea su efecto calmante, sino el euforizante que los acompaña", explica Antoni Gual.
La fotógrafa Nan Goldin declara la guerra a la familia que está detrás de la invención de OxyContin y de la ingeniosa estrategia de marketing que convenció a los médicos de que la medicina era inofensiva. La familia Sackler ha ganado millones por la venta de Oxycontin, un opiáceo sintético que provoca adicción. La epidemia de opiáceos ha matado a más de 200.000 personas en EEUU, donde cuatro de cada cinco personas comienzan con analgésicos recetados.