Un equipo multidisciplinar integrado por profesionales asturianos ha desarrollado la primera Guía de prevención del consumo de alcohol en edad pediátrica que se va a implantar en la sanidad pública española.
Expertos en Psiquiatría y patología dual han destacado la necesidad de impulsar la investigación sobre el uso terapéutico de algunos derivados de las drogas, ya que se ha demostrado que estas sustancias actúan "1.000 veces más rápido" que los medicamentos que se venden en las farmacias.
Las bebidas energéticas enmascaran la autopercepción de ebriedad, por lo que los usuarios siguen bebiendo y aumentan su riesgo de tener un accidente o de acabar en una pelea.
El proyecto busca prohibir la venta de licor entre las diez de la noche y las ocho de la mañana fuera de los bares, las happy hours y la publicidad en eventos deportivos.
La concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Paloma Corres, ha presentado este miércoles, dentro de las Charlas para prevenir desde la familia, la iniciativa 'Importa si tus hijos beben', que girará en torno a cómo desarrollar mensajes preventivos y el fenómeno del botellón visto por los jóvenes.
La ministra de Sanidad, en una entrevista para Cadena Cope, ha manifestado su voluntad de considerar las iniciativas que se debatan en la Comisión Mixta sobre drogas de cara a aprobar una futura ley de prevención en alcohol en menores de edad.
Según asegura una psicóloga clínica del Hospital Vithas-Nisa Aguas Vivas, Clara Díez, el trastorno antisocial y evitativo son las principales enfermedades mentales que padecen las personas con dependencia al alcohol, drogas o ciertos fármacos. Tras estas dos patologías se encontrarían el trastorno dependiente y el límite, todo esto siguiendo los criterios CIE-10 o DSM-5.
Las personas con trastorno explosivo intermitente (TEI) -un trastorno marcado por frecuentes estallidos físicos o verbales-- tienen un riesgo cinco veces mayor de abusar de sustancias como el alcohol, el tabaco y la marihuana que aquellas que no muestran un comportamiento agresivo frecuente, según concluye un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Chicago, en Estados Unidos.