En el mercado de drogas de Costa Rica, las mujeres suelen participar desde los márgenes, ocupando los eslabones más bajos y asumiendo riesgos que ponen su cuerpo en el centro de la transacción. Instrumentalizados por su capacidad de portar drogas y ser “penetrados” por el “producto de valor”, sus cuerpos sostienen transacciones y permiten la supervivencia en condiciones adversas, sin posibilidad de negociación.
A su vez, se genera un importante sesgo de género en la toma de benzodiacepinas al ser las mujeres y personas trans* las que consumen con más frecuencia estos fármacos
Desde el pasado mes de noviembre la psicóloga y psicodramatista Graciela Angood Paredes (directora de CREA psicología & formación www.creapsicologia.com) esta
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Según el estudio de consumo de sustancias psicoactivas del Plan Nacional de Drogas ESTUDES 2009, se constata que las drogas más consumidas por mujeres...