Después de dejar los estudios, ser abandonado por su novia, perder su trabajo y causarle problemas a su familia, Carlos Molina (19) decidió buscar ayuda en la Unidad de Desintoxicación del hospital Leonardo Martínez.
«Crecí con un padre alcohólico y desde los 16 años empecé a tomar sin importarme lo que podía pasarme. Es triste decir que tengo 19 años y que estoy interno en este lugar porque casi muero intoxicado por la bebida», expresa Molina.
El joven indica que su padre estuvo interno en la Unidad varias ocasiones y que ahora se avergüenza de haber seguido ese mismo camino.
«Aquí me salvaron la vida. Estaría muerto por intoxicación alcohólica si no existiera este lugar. Qué bueno que ya no lo van a cerrar porque iban a dejar a su suerte a muchos jóvenes que como yo tienen la enfermedad del alcoholismo», manifiesta el joven Carlos.
Respuesta
La Unidad de Desintoxicación Alcohólica estaba a punto de ser cerrada porque el proceso de convertir al Leonardo Martínez en un hospital pediátrico obligaba a ejecutar la medida.
Sin embargo, después que LA PRENSA hizo hincapié en el asunto a través de varias publicaciones que mostraban los efectos negativos que conllevaría, el presidente Juan Orlando Hernández respondió de forma inmediata y delegó la responsabilidad al diputado por Cortés, Alberto Chedrani, quien se encargará de encontrar un lugar adecuado para trasladar la Unidad que ha servido a unas 10 mil personas desde su fundación en 1993.
Según estudios del Instituto Hondureño para la Prevención del Alcoholismo, Drogadicción y Farmacodependencia (Ihadfa), el 75% de los estudiantes de educación media ya han probado algún tipo de bebida alcohólica.
«Muchos pueden decir que por borrachos no deberíamos ser atendidos en los hospitales, pero uno no quiere pasar por esto, son cosas que no se pueden controlar.
Es una enfermedad que no se cura sola. Lamento todo el sufrimiento que le he causado a mi mamá porque no merece pasar las noches en vela orando para que a mí no me pase nada mientras ando en la calle buscando alcohol», dice Carlos.
