UNAD, la Red de Atención a las Adicciones, lamenta que la aprobación parlamentaria del Proyecto de Ley de Servicios de Atención al Cliente (SAC) no contribuya, en el mismo grado que su versión original, a la protección de las personas más vulnerables ante los riesgos del juego. La norma se ha sometido a votación definitiva este jueves en el Congreso de los Diputados de manera que la enmienda propuesta desde el Senado que suprimía ciertos puntos que afectan al control de las casas de apuestas ha sido validada para su inclusión definitiva en el texto.
El Proyecto de Ley define un marco normativo que afecta a la Ley 13/2011, de 27 de mayo, de regulación del juego, en tanto que determina mecanismos de control y responsabilidad en el sector del juego. Sin embargo, una enmienda presentada desde el Senado por el Grupo Parlamentario Popular y el Grupo Parlamentario Junts per Catalunya sobre la Disposición Final Cuarta de la norma suprime medidas “imprescindibles para reforzar la base legal de la regulación de publicidad, promoción y patrocinio del juego”, tal y como han definido desde UNAD.
La norma aprobada este jueves en el Congreso prescinde de medidas esenciales de seguridad y trazabilidad que sí estaban en su redacción original, la cual fue aprobada por la propia Cámara Baja antes de trasladarse al Senado, y que se referían en primer término a la obligación de que los operadores de juego utilicen medios de pago nominativos y de titularidad de la persona que juega. Además, la otra medida excluida del texto final contemplaba la creación de un Registro de Proveedores de Juego y la posibilidad de sancionar a quienes presten soporte técnico o digital a webs sin licencia. Dos cuestiones que, en suma, constituían para UNAD “instrumentos imprescindibles para combatir el juego ilegal y evitar la suplantación de identidad”.
Desde la red de adicciones consideran que la supresión de estas medidas “constituye un retroceso en la protección de miles de personas que sufren o están en riesgo de desarrollar conductas adictivas, especialmente jóvenes y colectivos vulnerables”.
Por su parte, el Proyecto de Ley SAC sí introduce algunas limitaciones a la promoción del juego, como son “la aparición de personas o personajes de relevancia o notoriedad pública en las comunicaciones comerciales”, y todas aquellas “actividades de promoción que tengan por objeto la captación o conservación” de personas jugadoras, lo cual afectaría directamente a la disponibilidad de los bonos de bienvenida en las casas de apuestas.



