Llevan la friolera de once años. Y son imprescindibles. Bajo el nombre de un satélite tan vistoso como es Luna, la Asociación de Alcohólicos Rehabilitados de Chiclana viene ofreciendo diferentes servicios de apoyo al tratamiento del alcoholismo, consultas técnicas, grupos de autoayuda para alcohólicos y sus familiares, información y prevención, así como acompañamiento a las consultas, seguimiento y asesoramiento a jóvenes con problemas de integración escolar.
Por eso el denominado Proyecto Luna es más que un proyecto integral de terapias y asistencia psicológica. Es toda una institución en la ciudad, un referente para otras organizaciones, una necesidad para muchos colectivos y familias.
Puesto en práctica cada año mediante la aportación económica del Ayuntamiento de Chiclana en un convenio, y la colaboración de otras entidades, el Luna hace hincapié en la prevención de las adicciones y ofrece actividades relacionadas con la materia a los centros educativos, trabajando con dinámicas de grupo, la participación y el debate de los padres y los propios escolares.
Las psicólogas Elena Fornell y Ana Pecci, ambas con experiencia en Psicología Infantil y Familiar, así como por el psicólogo Gustavo Torres, alma mater del proyecto, vienen trabajando este año de nuevo en distintos colegios y guarderías de la localidad. Así, a lo largo de la pasada semana se han desarrollado sesiones del Proyecto Luna con alumnos de segundo y cuarto curso de ESO del colegio Safa o la guardería Huerta Rosario. La Escuela Infantil La Alborada, con la temática Obediencia infantil e importancia de las normas y límites, ha sido otra de las actuaciones desarrolladas últimamente.
El Proyecto Luna recibe también casos de alumnos conflictivos o con problemáticas especiales, que llegan derivados de Educación y Servicios Sociales. El fracaso escolar o el consumo de sustancias son dos de las temáticas que abordan, y tratan, este equipo de profesionales.
