Enfermera, Doctora por la Facultad de Medicina de la Universidad de Murcia, en la línea de Salud Pública. Máster en Tabaquismo (PIUFET) de la Universidad de Cantabria. Máster en Salud Pública de la Universidad de Murcia.
Enfermera de Salud Pública en el Servicio de Promoción y Educación para la Salud de la Dirección General de Salud Pública y Adicciones. Consejería de Salud de la Región de Murcia. Profesora Asociada del Departamento de Ciencias Socio Sanitarias de Facultad de Medicina de la Universidad de Murcia.
Coordinadora del Grupo de Tabaquismo de FAECAP Coordinadora del Grupo de Tabaquismo de FAECAP (Federación de Asociaciones de Enfermería Comunitaria y de Atención Primaria) y de SEAPREMUR (Sociedad Murciana de Enfermería Familiar y Comunitaria).
Miembro del Grupo Gestor EVICT (Evidencia Cannabis-Tabaco) impulsado por el Comité Nacional Para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) y financiado por el Plan Nacional Sobre Drogas.
Delegada del CNPT en la Región de Murcia
Al igual que nos pasó con el tabaco, se precisan muchos años de estudio para poder identificar los daños causa su consumo, y más teniendo en cuenta la variabilidad de estos productos y sus componentes. Los datos disponibles hasta ahora nos hablan, además de adicción a la nicotina que también tiene efectos cardiovasculares perjudiciales, inflamación pulmonar crónica, trastornos neurológicos, cardiovaculares