Se escucha en la radio y en la televisión que el uso de metanfetaminas ha ido aumentando enormemente no sólo en las calles, sino también en comunidades profesionales y administrativas.
La metanfetamina se fuma, se absorbe por la nariz, se inyecta o se la toma disuelta en bebidas. Entre otros efectos, esta droga causa sensación de euforia y placer. En la salud general, aumenta la presión arterial causando ritmos cardiacos irregulares, falta de aire y eventualmente la muerte.
¿Por qué mi dentista debe saber si yo uso drogas?
El uso de cualquier medicamento o droga afecta no sólo el órgano, o el síntoma para lo cual se prescribe, sino también a todo el organismo. El uso de drogas ilícitas —como las metanfetaminas, mejor conocidas como “hielo”, “cristales” o “cristal meth”— puede tener una reacción no esperada con los medicamentos que se usan en el consultorio dental, por ejemplo la anestesia que recibe cuando se atiende con el dentista y que puede tener resultados fatales.
¿Quiénes tienden a usar este tipo de droga?
El uso de esta droga ha ido aumentando en número a la vez que ha ido disminuyendo en edad. Por lo tanto, según las estadísticas, la mayoría de los consumidores de esta droga se encuentra entre los 18 y 40 años de edad, sin descartar el segmento de población que asiste a la universidad.
Sin embargo, se ha visto que incluso jóvenes entre los 12 y 14 años han usado este tipo de drogas por lo menos una vez.
¿Qué efecto tiene esta droga en mis dientes?
La destrucción de la dentición es inmensa. El patrón de caries que se presenta es similar al que presentan los niños con el síndrome de caries tempranas o caries de biberón. Las lesiones se presentan como hoyos grandes en las superficies que están hacia las mejillas de la boca y entre los dientes de enfrente. La destrucción de los dientes es tan severa por el ácido de la droga que la boca se reseca haciendo que se consuman más refrescos. En general, las personas adictas a este tipo de drogas dejan de atender su higiene personal, por lo tanto se convierte en un ciclo sin fin: droga-ácido-caries-destrucción de dentición.
