Alcohol, tabaco, cannabis y drogas de síntesis, son, por ese orden las drogas más consumidas por los adolescentes de la región de entre 14 y 18 años. Las mujeres han ganado terreno a los hombres y son las que más abusan de esas sustancias, salvo en el caso del cannabis y las sustancias volátiles (pegamentos). En el caso del alcohol, uno de cada dos escolares bebe habitualmente, el 20 por ciento se emborrachó en el último mes y el 11 p ciento confiesa que bebe en exceso, según los datos de la Encuesta a la Población Escolar de 2002.
Beber ya no es cosa de hombres. Las mujeres menores son las que más lo hacen y se sitúan en cabeza en todos los consumos esporádicos, anuales y los producidos en el último mes, con porcentajes que alcanzan el 74,7 por ciento, 73,9 y 53,8 frente al 73,2, 72,5 y 53,1 de los hombres. Además, se inician al consumo por su pareja, mientras que los varones lo hacen influenciados por su grupo de amigos. Estos adolescentes son también fumadores empedernidos. El 37,6 por ciento fuma de modo habitual, mientras que el 43,8 lo hace con relativa frecuencia y el 19,2 fuma a diario. De nuevo las chicas (22,7 por ciento), supera a los chicos (15,6). Respecto al cannabis, esta sustancia de abuso es tomada de forma habitual por el 22 por ciento, seguida del éxtasis, con el 3,7 por ciento, unas cifras que van en aumento en el caso de las drogas de diseño, con el incremento de los casos de urgencias, según la Memoria de la Agencia Antidroga de 2002. Por último, uno de cada cien escolares -varones- había esnifado inhalantes en el último mes.
